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Era una "noche" oscura, la "luna" se había escondido entre las "nubes" en uno de esos "pueblos" donde ya casi no vive nadie. Llovía. De la chimenea de una de las casas salía humo y por la ventana se vislumbraba el resplandor del fuego. Unas "risas" se escaparon por las rendijas. Me acerqué y me asomé a la ventana. Allí había un viejito y una viejita sentados en dos balancines. El fuego se reflejaba en sus caras, la felicidad y la paz en sus ojos. Sus dedos eran como "niños" jugueteando. Volvieron a reir a carcajadas. Hablaban de tiempos pasados, de tiempos compartidos. En su tono se podía adivinar que lo hacían con nostalgia, pero también con la alegría del que sabe que ha vivido y que aún lo hace. Quizá con pequeñas cosas como compartir unas "patatas fritas", o con grandes como la "complicidad" que existía entre ellos. Sólo necesitaban mirarse a los ojos, escuchar la voz del otro para saber cómo se sentían. Recordaban el día en que echaron a "volar" solos, qué sensaciones, qué experiencias, cuantas ganas de comerse el mundo. Uffff, y cómo no? recordaban su primer "beso", aquella noche en la que se conocieron. Primero estuvieron dando un paseo, se pusieron a bailar en el metro con la música de aquel chico tan simpático que tocaba, uysss cual era la canción? jaja cómo no recordarla? claro que si, era "someone like you". Aquella noche acabaron en una pequeña terraza al lado del mar, tomando un café y dando los buenos días al "sol". Desde entonces supieron el significado de la palabra "amar". "Tu" y "yo".